El foyer del teatro San Martín (avenida Sarmiento 601) respirará esta tarde, desde las 19, al ritmo del 2x4 cuando Mariela Acotto haga clásicos del género en un ambiente cómplice.

“El lugar es el espacio de recepción y celebración, por eso me pareció ideal para hacer ‘Tertulia de tangos’, porque la gente estará cerca, disfrutando de un piano de cola increíble, rodeado de arañas y cristales muy refinados, donde la música y mis emociones estarán a flor de piel. Será un encuentro íntimo y de excelencia”, adelantó la vocalista en diálogo con LA GACETA.

No estará sola; será secundada por Quique Yance en piano (quien es también el director musical del espectáculo), Víctor Juárez en bandoneón, Marianna Kasakova en violín y Francisco Santamarina en guitarra. “Es un lujo este equipo, no solo musicalmente sino como personas”, describió.

Acotto es además psicóloga y como tal menciona las sensaciones que le aporta el tango a su vida: “desarraigo, pérdidas, desamores, traiciones, nostalgia... me permite transmitir emociones y situaciones universales por las que atravesamos todos alguna vez. Nada bueno se puede transmitir en el escenario si no existe una energía que potencie las emociones”.

“Es el género con el que más me identifico. Alguna vez un psicoanalista y colega, Osvaldo Aiziczon, fue a verme y mirándome a los ojos me dijo: ‘sos una mina que declara parte de su vida en cada canción’. Descubrió mi esencia de intérprete, creo que soy una intérprete que canta. Cuento la historia que entraña cada canción; esa historia me tiene que atravesar para luego poder cantarla. Si no ocurre eso, descartó el tema de mi repertorio. Mi voz solo es un canal, canto con todo mi cuerpo y mis expresiones también”, agregó.

A la hora de elegir un repertorio, apuntó a los compositores y poetas del tango, los hermanos Homero y Virgilio Espósito, Homero Manzi, Enrique Santos Discépolo, Enrique Cadicamo “y tantos otros, que permiten con sus obras traducir lo que sucede en los vínculos urbanos y amorosos”. “Garúa”, “Los mareados”, “Che bandoneón”, “Yuyo verde”, “Niño bien”, “Se dice de mí” y “Naranjo en flor” son algunas de las composiciones que cantará.

“Realmente varía mi gusto por una época en particular, pero me identifico con los tangos en su momento de apogeo que sería entre 1940 y 1950, aunque incluyo otros como ‘Mi vieja viola’ que es del 20 y también otros más actuales como ‘Desencuentro’, del 62. Creo que la gloria del tango en mi familia se la vivió intensamente. Mi abuelo Salvador Ferri animaba junto a Alberto Daham las famosas Milongas del Bar Vidal, del Club Estudiantes, entre tantos otros lugares donde las orquestas de Buenos Aires salían de gira por todo el país. Esa era mi canción de cuna”, recordó.

En esa evocación, mencionó especialmente lo que significaba “escuchar tangos los domingos en familia, en el combinado Winco de mis abuelos o de mis padres, cuando poníamos algunos de los discos que hoy integran la extensa colección de vinilos que tengo en mi estudio”.

En el Virla

“Tangos y habaneras españolas” es el nombre del concierto solista de piano que el español Raúl Canosa ofrecerá desde las 20 en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).

“Aunque parezca mentira, no todo es Brahms, Beethoven y Chopin. La música popular tiene una riqueza única y característica que nunca deja de inspirar a músicos y artistas de todo tipo”, señaló.

En estreno, el músico presentará “Retratos de España”, de Carlos Danés, en un listado de temas que mezcla al argentino Carlos Guastavino (“La rosa y el sauce”), habaneras de Xavier Montsalvatge, Ernesto Halffter y Miguel González-Valles, el célebre “El choclo” y “El pelele”, de Enrique Granados.